Por Eduardo Grimaldo
En este primer capítulo los autores dan una introducción a una reprogramación neurolinguistica, ya que como fundamento científico mencionan el sistema de activación reticular, que trabaja en conjunto con otras neuronas situadas en el tronco del encéfalo las cuales se encargan del mantenimiento del estado de alerta. Este sistema, envía proyecciones a los núcleos intratalámicos y estos a su vez a la corteza cerebral.
Es decir, el sistema reticular funciona como un filtro que decide que información llega y cuál no. En otras palabras, se encarga de fijarse en ciertas cosas e ignorar el resto.
Es de suma importancia tener presente esto ya que el músico suele enfocarse en sus carencias e ignorar sus virtudes, sin embargo no perder de vista los logros ayuda a tener una visión mas real de la situación y a su vez nos mantendrá motivados.
Incuso suele ser mucho mas benéfico potenciar nuestras virtudes que tratar de corregir nuestras debilidades, y no hay que mal entender esto, siempre es necesario llevar nuestras debilidades al minimo, sin embargo lo que no se debe hacer es enfocarse tanto en ellas que descuidemos lo que realmente hacemos bien.
Otro punto para lograr una reprogramación es tener en claro que todo lo que creemos no es otra cosa que una interpretación subjetiva de la realidad que abstraemos de acuerdo a nuestras experiencias de vida. A partir de este conocimiento se pueden encontrar y extraer los pensamientos limitantes. Para ello se utiliza el llamado metamodelo del lenguaje, el cual consiste en una reestructuración de esquemas mentales y las creencias limitantes. Este refiere a doce patrones de habla divididos en los siguientes grupos:
Omisiones
Distorsiones: interpretaciones erróneas y disfuncionales de la realidad
Generalizaciones
En esto, otro concepto importante es el de esquemas mentales. Según Aaron Beck y Albert Ellis citado por Galduf y Dalia, "...son patrones cognitivos estables que constituyen la base de la regularidad de las interpretaciones de la realidad. Las personas utilizan sus esquemas para localizar, codificar, diferenciar y atribuir significaciones a los datos del mundo"
Estos esquemas se aprenden de las experiencias que pasamos y pueden permanecer latentes y activarse con un evento significativo.
Comprender estos esquemas nos ayuda a encontrar las cosas que nos hacen reaccionar de cierta forma y afrontar las situaciones con otra actitud, ya que esta influye directamente en nuestro rendimiento.
En los músicos es muy común encontrar una tríada cognitiva de gran rigidez que provoca descontrol emocional.
Yo debo o tengo que...
Los demás tienen o deben...
El mundo tiene que o debe...
Aquí los autores dan un ejemplo que es
Yo tengo que tocar sin fallos
El director tiene que respetarme
Las audiciones deben ser justas
En un mundo ideal así es como las cosas deberían ser, sin embargo sabemos que las cosas no siempre son como quisieramos. No podemos controlar ciertas situaciones externas pero si podemos controlar como reaccionamos ante ellas. Adaptarse al entorno y fluir, es escencial para lograr una carrera próspera.
En este capítulo se habla de las distorsiones del músico las cuales se mencionan a continuación:
Sobregeneralización; sacar una conclusión general de hechos particulares sin base suficiente. Ej. Nunca conseguiré afinar este fragmento
Abstracción selectiva: enfocarse en un solo aspecto de la situación sin mirar el panorama completo. Ej. Es muy duro ponerse ante el tribunal, me resulta insoportable
Pensamiento polarizado: mirar de forma extrema las situaciones sin tener en cuenta los puntos intermedios. Ej. Ese pasaje lo llevo muy mal
Personalización: relacionar todo con uno mismo sin base suficiente. Ej. Esta pidiendo el mismo pasaje que yo fallé la última vez, lo hacen para fastidiarme
Visión catastrófica: ver de manera exagerada lo que puede ocurrir. Ej. Si no gano la plaza, será el fin de mi carrera
Falsedad de control: se ve a si mismo como el único responsable de los acontecimientos de su vida. Ej. En mi mano está ganar la plaza
Razonamiento emocional: creer que lo que se siente es cierto necesariamente. Ej. Me siento muy nervioso porque me juego mucho
Falacia de justicia: valorar como injusto todo aquello que no coincide con nuestros deseos. Ej. No hay derecho a que la sala tenga tan mala acústica
Etiquetas globales: etiquetar de manera global a los demás o a si mismo. Ej. Es que yo soy muy nervioso
Falacia de recompensa divina: suponer que la situación mejorara magicamente. Ej. Tienen que aprovarme, lo merezco, llevo un año tocando con ellos
Por último, en este capítulo los autores hablan acerca de el enfoque, que consiste en detectar y potenciar nuestras fortalezas y revisar nuestra lectura de la situación para encontrar posibles distorsiones. Mientras que la actitud es la disposición del ánimo ante una situación que se va a afrontar. Mencionan estos tres tipos:
Positiva: Visión optimista y confiada que busca la consecución de los objetivos
Proactiva: se prioriza la actuación y la busqueda autónoma de la acción
Realista: visión objetiva de la realidad para afrontarla de manera efectiva
En conclusión los autores proponen que el primer paso para para volvernos mas eficientes es encontrar los esquemas mentales en los que generamos creencias limitantes para trabajarlas y poder corregirlas.
Usualmente la realidad no es tan mala como lo vemos, simplemente que el afrontar situaciones complicadas nos provoca estrés y si no somos concientes de como deberíamos resolver o actuar, solo reaccionamos y nos enfocamos en el problema pero dejamos de lado la busqueda de solución. Cuando aprendemos a modificar esas conductas para que sean mas objetivas y las afrontemos de una manera más confiada, nos volvemos mas eficientes.
Eduardo Grimaldo
Maestro en educación con estudios profesionales en música
Director de Black Notes Academia Musical
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